Provincia: Salta
Ecorregión: Selva de las Yungas y Chaco Seco
Superficie: 44.162 ha
Creación: 1948 (Decreto N° 18.800/48)
Paisajísticamente dominado por las serranías de la Cresta de Gallo, que lo envuelven dándole una vista de anfiteatro enorme, este Parque tiene sectores que corresponden a los ambientes chaqueños y de las Yungas. La vegetación se distribuye en distintos pisos o estratos a medida que aumenta la altura.
El más bajo corresponde al bosque chaqueño serrano, con especies como el horco quebracho, el cochucho, el atamisque y los cardones. Luego comienza la selva de transición con tipas y pacaraes, seguida luego por la selva montana con grandes ejemplares de cedro, tarco, tipa y nogal. Más arriba aparece la selva de mirtáceas, donde predomina el palo barroso, el alpamato, el mato, el chal- chal y el güili, y sobre esta los bosques de pino del cerro, luego de aliso y finalmente la queñoa.
Todos estos están acompañados por gran variedad de epífitas como la bromelia tanque, los claveles del aire y varias especies de orquídeas. Por su parte, en las zonas más altas de los cerros crece el pastizal serrano.
La fauna es variada con aves como la chuña de patas rojas, la charata y la pava de monte común, y también corzuelas pardas y rojas, pecaríes, lobitos de río, tapires, zorros y pumas. Los ríos y arroyos están poblados por varios peces nativos como dorados, bogas, bagres y sábalos.
La región tiene una larga historia de ocupación humana. En la era precolombina la ocuparon comunidades agricultoras. En el siglo XVIII fue un fuerte de frontera y más tarde una estancia, antes de convertirse en Parque Nacional.